A petición del presidente del Tribunal de Comercio de París, Frank Gentin, LVMH y Hermès han firmado un acuerdo que pretende imponer un clima de paz entre ambas compañías, enfrentadas desde que en octubre de 2010 se supo que LVMH había entrado a hurtadillas en el capital de Hermès.
El gigante del lujo renuncia a hacerse con el control de Hermès. El acuerdo firmado implica que LVMH repartirá cerca del 15% de Hermès entre sus propios accionistas, antes del 20 de diciembre de 2014, conservando aproximadamente el 8,5%, a través de Grupo Arnault (propiedad del presidente de LVMH, Bernard Arnault). Asimismo se ha comprometido a no adquirir más acciones de Hermès en el plazo de cinco años. Con este acuerdo se da por terminado también el enfrentamiento judicial, estando aún pendiente una denuncia penal interpuesta hace dos años por Hermès por «manipulación de precios y uso de información privilegiada». Según el comunicado oficial, tanto Axel Dumas, presidente de Hermès, como Bernard Arnault, «se alegran de que las relaciones entre los dos grupos representativos del savoir-faire francés se hayan pacificado».
Se pone así punto final a un conflicto que duraba cuatro años, desde que LVMH sorprendió a todo el mundo al comunicar que tenía el 14% de Hermès. LVMH se había saltado «el conjunto de reglas destinadas a garantizar la transparencia indispensable para el buen funcionamiento del mercado», según comprobó a posteriori la AMF, el organismo regulador del mercado bursátil francés, por lo que le impuso una multa de 8 millones de euros, una sanción «a la altura de las alteraciones provocadas».
El presidente del tribunal de comercio de París, Frank Gentin, ha sido el artífice de la paz. Visto que las posturas se radicalizaban y que el conflicto podía empañar la imagen de estos dos iconos del lujo francés, medió entre las dos compañías justo antes del verano para convercerlas de que el enfrentamiento no les llevaba a ninguna parte. Y en tres meses, el acuerdo ha sido posible. Tal como señala la prensa francesa, parece que las dos compañías esperaban como agua de mayo encontrar una salida honorable a un asunto cada vez más feo e intrincado.
Crónica del conflicto
2001-2002
LVMH compra en secreto el 4,9% de Hermès.
2007
LVMH empieza a especular con las acciones de Hermès, utilizando productos financieros muy complejos, los «equity swaps».
2010
LVMH transforma los «equity swaps» no en efectivo como se esperaba, sino en acciones. El 23 de octubre, LVMH anuncia públicamente que posee el 14,2% de Hermès, cuota que puede subir al 17%. La familia Hermès pide a LVMH que se retire del capital. La AMF (lo que en España sería la CNMV) abre una investigación.
2011
La familia Hermès crea un holding para bloquear el acceso a la compañía.
2012
Hermès y LVMH presentan denuncias la una contra la otra.
2013
La AMF condena a LVMH a pagar una multa de 8 millones de euros, la más alta impuesta por la autoridad del mercado financiero.
2014
La participación de LVMH en Hermès asciende a 23,2%. El 2 de septiembre las dos compañías firman la paz.